Las tarjetas de crédito son un producto bancario que, bien utilizado, permite una adecuada gestión de nuestro dinero. Sin embargo, limitar el saldo de tu tarjeta de crédito es quizás la opción más acertada. Para aquellos usuarios que no tienen un buen control de su economía o que simplemente no desean adquirir una deuda importante. ¿Cuándo es conveniente hacerlo?
Débito vs Crédito
En este artículo desgranamos las diferencias entre tarjeta de débito y crédito, pero recordamos brevemente en qué consisten. Las tarjetas de débito y crédito están siempre asociadas a una cuenta bancaria; pero en el caso de las de débito, tienes disponible el saldo que tengas en el banco. Las tarjetas de crédito ofrecen un dinero que no se posee y que sirve para gastar con libertad. Por hacer uso de ellas, el banco cobra una cantidad en forma de intereses. Según datos del Banco de España, el uso de las tarjeta ha aumentado de manera considerable en los últimos años.
El saldo de las tarjetas de crédito
El saldo que tenemos disponible en nuestra tarjeta depende de diversos factores. El historial crediticio, nivel de ingresos, saldo de la cuenta corriente o la existencia de activos como un plan de pensiones. Hay tarjetas que ofrecen cantidades pequeñas como 300 euros, a otras capaces de alcanzar varios miles de euros.
A medida que el saldo se va consumiendo, se pone en marcha el mecanismo de generación de intereses, variables según el emisor de la tarjeta. En algunas ocasiones, y cuando el saldo de la tarjeta de crédito está próximo a agotarse, la entidad financiera aumenta nuestro saldo. Pero esta medida puede hacer que aumentemos nuestra capacidad de gasto y se produzca un efecto no deseado, el sobreendeudamiento. ¿Qué hacer entonces si vemos que hemos empezado a perder el control?
Cuándo limitar el saldo de nuestra tarjeta de crédito
Precisamente cuando comenzamos a darnos cuenta que cada vez necesitamos más y más dinero hay que parar. Limitar el saldo es un proceso simple, bastará con realizar una llamada a tu entidad financiera y solicitar que deseas bajar el saldo en la tarjeta de crédito. Así estarás evitando tentaciones futuras.
Igualmente, es interesante limitarlo cuando veamos que nuestros ingresos van a decaer por alguna razón, como el desempleo. No conviene hacer uso de la tarjeta de crédito para los gastos comunes; sino para situaciones extraordinarias que sepamos que pueden ser resueltas más adelante.
Limitar la tarjeta de crédito es útil para conocer nuevas maneras de ahorrar y utilizar más el débito. En nuestro blog hemos hablado muchas veces del ahorro y de cómo puedes hacer para guardar fácilmente 50 euros al mes con solo unos pequeños cambios de hábitos. Tener una economía saneada es la mejor manera de disfrutar de nuestras finanzas. Dejar la tarjeta de crédito para las ocasiones que lo requieran es el primer paso para tener el control de nuestra economía.
Por tanto, si deseas limitar el saldo de tu tarjeta de crédito, ponte un tope que seas capaz de asumir y evita la tentación de disponer de un saldo demasiado elevado. Agotarlo es cuestión de tiempo y puedes encontrarte con una pesada losa que te llevará años quitarte.