En el mundo de las finanzas es muy común el uso de tarjetas para abonar nuestras compras; así como para sacar dinero de los cajeros automáticos. A la extensa gama de tarjetas bancarias, se ha unido un producto que goza de una extraordinaria salud, hablamos de la tarjeta bancaria prepago. Se trata de una gran solución para aquellas personas que, sin perder ninguna funcionalidad, quieren tener control sobre sus gastos. Te invitamos a conocer cómo son y por qué están tan extendidas.
¿Qué es una tarjeta bancaria prepago?
Es una tarjeta de débito que posee la capacidad de ser cargada con un importe que nosotros estimemos, desde unos pocos euros a cantidades mayores. Sabemos que las tarjetas de débito llevan asociado el saldo de la cuenta bancaria a la que están adscritas. Sin embargo, a una tarjeta bancaria prepago se le puede asignar una cantidad específica. Lo que en un principio no parece tener mucha utilidad, se antoja como una buena medida para cierto perfil de cliente.
Las ventajas de una tarjeta bancaria prepago
Cada día son más las personas que se decantan por este producto, ya que las ventajas asociadas son muy contundentes. Destacamos las siguientes:
- Son ideales para utilizarlas para comprar a través de internet. Con ellas logramos reducir la posibilidad de que nos vacíen la cuenta corriente o se produzca un cobro indebido. Si, por ejemplo, vas a adquirir un producto con un valor de 37 euros. Puedes recargar tu tarjeta bancaria prepago desde tu cuenta corriente con esa cantidad exacta.
- Una tarjeta bancaria prepago permite reducir el nivel de gasto. Tener mucho saldo en nuestra cuenta corriente, y una tarjeta de débito sin límite; o una de crédito pueden llegar a ser un peligro. Por esa razón, estas tarjetas son ideales para aquellos que no pueden controlarse fácilmente, a la vez que le ayudan a ahorrar. Nada más cómodo que fijarse un presupuesto semanal y adaptarse a él.
- En caso de robo físico, estamos reduciendo la posibilidad de que el ladrón se haga con el importe máximo de la tarjeta. Sino con el que hay precargado.
- Generalmente tienen un coste muy pequeño, o en el mejor de los casos son gratuitas.
Cómo solicitar una tarjeta bancaria prepago
Estas tarjetas son ofertadas por prácticamente la totalidad de entidades bancarias de nuestro país. Basta con solicitar una cita en tu oficina, o acceder a tu banca on line para solicitar la que desees. En pocos días la tienes en tu domicilio, y su uso es idéntico al de cualquier tarjeta de débito. Pon el código PIN que desees y guárdala en tu cartera. O mucho mejor, si tienes un smartwatch o un smartphone, probablemente puedas asociarla a estos dispositivos. De esta forma podrás comenzar a pagar de forma electrónica, que siempre es más seguro.
¿Y cómo se recarga?
Es muy sencillo, puedes hacerlo o desde un cajero automático, o bien accediendo a tu banca on line. En el apartado «tarjetas», selecciona la tuya y asignas la cantidad que desees. Tanto el mínimo como el máximo depende de cada entidad. Una vez confirmada la operación, este importe se resta de tu cuenta bancaria y queda almacenado en tu tarjeta bancaria prepago. ¿Ves como es muy sencillo?