Tener deudas no resulta nada fácil, pero a veces es inevitable para continuar con la actividad diaria o para realizar compras importantes. Es cierto que existen situaciones que pueden alterar esa previsión y provocar un incumplimiento no deseado. Es entonces cuando es necesario tener la información correcta sobre cómo postergar el pago de un crédito.
He solicitado un crédito y tengo dificultades para devolverlo
Una de las desventajas que pueden surgir al contratar un préstamo o crédito, es la posibilidad de no poder hacer frente a la cantidad reclamada en el plazo establecido.
Las consecuencias del impago serán similares a las de la contratación de cualquier otro servicio de tipo financiero. Entre ellas, el incremento de la deuda según van transcurriendo las semanas.
Es fundamental evitar incurrir en un posible impago. Antes de solicitar un crédito es necesario contar con un presupuesto mensual adecuado y una buena organización.
Consecuencias de no pagar un crédito
Una de las primeras consecuencias será el aumento de la deuda pendiente por no cumplir los plazos de devolución. A esta deuda se añadirán intereses de demora que irán cambiando en función del tiempo que se retrase el pago.
En la gran mayoría de entidades financieras figuran unas comisiones fijas por impago, más un porcentaje variable. El cual se añadirá de forma mensual.
En segundo lugar, a partir del tercer o cuarto mes desde el impago, la entidad financiera reclamará la deuda por vía judicial. Si aún así no se puede efectuar el pago, esto podría llegar, según las distintas circunstancias; hasta el embargo de los bienes del demandado.
Por último, se puede llegar a incluir al susodicho en ficheros como la RAI o ASNEF, listas relacionadas con la morosidad. Esto tendrá como consecuencia mayor dificultad para acceder a nuevos préstamos o productos financieros.
Estas son, a grandes rasgos, las diferentes etapas derivadas del impago y acumulación de deudas.
Cómo postergar el pago de un crédito
Ya hemos visto las sanciones que conlleva no atender estos plazos y las distintas situaciones que tiene esta postergación de los pagos.
En cambio, resulta interesante contemplar que estas entidades muestran buena disposición si precisas una prórroga para pagar tu deuda. En el caso de que no puedas cumplir con los plazos contratados, se puede solicitar una ampliación para pagar el crédito más adelante.
Es preferible enfrentar la dificultad, sea cual sea, y plantear a la entidad la realidad de forma sincera; dado que para ellos tampoco es agradable acudir a la vía judicial. Es mejor refinanciar una deuda que no pagarla. La información y el conocimiento es fundamental en estos casos y, por ello existen numerosas asesorías especializadas en cómo postergar el pago de un crédito para ayudar a la gente a hacer frente a estos problemas financieros.